Emos Vencido

Carta abierta al pueblo de Querétaro.

Enemigo público no.1

Ante todo, estimados queretanos, bienvenidos al siglo XXI, jamás pensamos que lo lograran pero la tecnología llegó hasta su rincón del mundo y al parecer ahora tienen Internet, y sólo un año después que Kenia, eso es progreso.

Claro que no nos hubiéramos enterado de su feliz arribo a la red mundial de no ser por el feliz espectáculo que crearon el pasado viernes 7 de marzo en la Plaza de Armas y que le está dando la vuelta al mundo.

Nos referimos, obviamente, al linchamiento masivo de chicos emos, donde alrededor de 1,000 metaleros, skaceros, goths, punks y demás miembros productivos de la sociedad tuvieron el increíble valor de decir "basta" al cáncer social que son el grupito de 30 ó 40 emos que se sientan en Plaza de Armas sin hacer absolutamente nada. No cabe duda que ahora estos peligrosos engendros lo pensarán dos veces antes de ponerse la ropa que les gusta (¿cómo se atreven?).

Y es doble la felicitación, ya que la convocatoria anónima por email y SMS evitó que los autores intelectuales tuvieran que dar la cara y así ser descubiertos por emos infiltrados en altas esferas de gobierno. La labor de unos cuantos los cubre de gloria a todos. Desde ahora, cuando se piense en Querétaro, se recordará esta valiente masacre.

Y es que desde que el género Emo fue inventado a finales de los 80 por músicos punks hartos de la violencia (como si perder medio litro de sangre en un concierto fuera cosa del otro mundo), los emos no han hecho sino hacerle imposible la vida a todos con su maldita manía de estar delgados, pintarse el pelo y vestirse como maniquiés de Monster o Hot Topic. ¿¡Había existido un mal más grande!?

Afortunadamente, ustedes, queridos queretanos, decidieron no tolerar esta repulsiva imagen por más tiempo y decidieron actuar. Después de todo, nada mejora la imagen de una ciudad como un despliegue público de violencia no provocada.

Pero los emos se lo han ganado, ya que, como ustedes dicen “adoran a los gays y todo emo ha besado a algún amigo; siempre usan ropa rosada, morada y demás colores emosexuales”. Todo el mundo sabe que la única forma en que dos hombres pueden expresarse su amistad es a través de fracturas múltiples. Además los besos entre hombres colapsan civilizaciones enteras, ahí tienen ustedes a la decadente Grecia, que sólo trajo perversión con su filosofía, democracia, escultura, arquitectura, matemáticas, astronomía, teatro, poesía, olimpiadas y demás cosas que no vienen en la Biblia y que sólo a un puto podrían interesarle.

En cuanto al color de la ropa, ahora que puede ocasionar una golpiza, nuestra ciudad por fin está segura... o eso creíamos:

Porque todo el mundo sabe que una vez que no haya emos, los más afeminados de sus tribus van a ser los goths, con su maquillaje y sus uñas pintadas. Un metalero que se respete jamás podría tolerar esta mariconada. Y una vez que hayamos "purgado", por decirle de alguna forma, a esta raza inferior, claro, habrá que deshacerse de los punketos. Después de todo, pasan mucho tiempo peinándose y todo el mundo sabe que de eso a ponerse tetas sólo hay un paso.

Ahora sí, por fin el mundo será un lugar digno de habitarse... aunque sería mucho mejor si no existiera el ska, tal vez haya llegado la hora de enseñarles a estos nacos a que escuchen música de verdad o mueran... es drástico, pero justo.

En verdad mantener pura una ciudad representa mucho trabajo. Aquí tal vez será mejor pedir su ayuda a las autoridades. Se podría crear un cuerpo especial uniformado (de café o algún otro color masculino) que patrullara las calles y que se encargara de reunir en un corral (o acorralar) a todos aquellos que no cumplan con los parámetros autorizados de vestimenta, gusto musical o que tenga el pelo largo (es sucio).

Claro, la acción ciudadana seguirá siendo necesaria para mantener el orden. Podría armarse una tribu urbana que disuadiera a los recién llegados de toda conducta impropia. Para evitar represalias, este heroico clan podría ocultar su identidad con sábanas blancas, por ejemplo.

Muchos tratarán de disimular sus diferencias escuchando su música y vistiéndose de colores en la privacidad de su casa, pero para eso podríamos nombrar a un tribunal que "inquiera", por así decir, sobre las actividades privadas de todos los ciudadanos. Seguramente los vecinos responsables denunciarán oportunamente todo comportamiento sospechoso para "cazar", por utilizar un término al azar, a los "infieles". Podrían utilizarse métodos de "interrogación aumentada" como aquellos con los que los Estados Unidos han obtenido tantas confesiones de terroristas y demás gente morena e indeseable.

Una vez que tengamos ubicados a todos los "otros", es vital "concentrarlos" en un mismo lugar, como un "campo", por ejemplo, donde estén controlados y no infecten a la sociedad con sus canciones de My Chemical Romance.

Ésta sería la solución a todos nuestros problemas, casi podríamos decir que sería la solución final. ¿Qué podría salir mal?

Así que, nuevamente, Querétaro, gracias por comenzar esta lucha (mi lucha también) que pronto se extenderá por todo el país (ya se están formando grupos locales de nuestras "juventudes") y llevará al país a despertar, México, despertar de esta miseria infinita en que nos habían sumido una bolita de adolescentes deprimidos.

Con respeto y admiración,

El Editor

Por un Querétaro sin emos, punks, gays, pobres, nacos, prietos, inválidos, enfermos y todo aquél que no se acomode a nuestra definición de normal (próximamente, tú).

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